Historia de las Estufas de Inercia térmica
Una estufa de inercia es un sistema de calefacción que empezó a desarrollarse en el siglo XVI. Hasta ese momento los antiguos modos de calefacción se habían mantenido mas o menos inalterados con pequeñas variaciones, siendo la chimenea o el fuego a tierra el principal modo de calefacción hasta ese momento en las casas.
Pero dos factores empezaron a afectar profundamente los sistemas de calefacción que se habían construido hasta ese momento en Europa: Uno de ellos fue la creciente preocupación sobre el acceso a la madera debido a la reducción de bosques disponibles. El otro era la seguridad ya que hasta ese momento el principal sistema de calefacción,la chimenea, cuya eficiencia era solo del 10%, producía a menudo incendios en las casas. Fue entonces cuando un nuevo factor tuvo que ser añadido: El Clima. Entre 1550 y 1850 hubo un periodo de frío extremo en Europa. Los investigadores modernos lo llaman La Pequeña Edad de Hielo.
La típica estufa a principios del siglo XVI era en términos de eficiencia energética poco mejor que una chimenea. Esta eficiencia se calcula en el 20%. La gente no era consciente del problema. Los europeos mas ricos habían empezado a usar en el siglo XV las estufas de hierro, que aunque rudas y de baja eficiencia tenían una ventaja sobre las estufas de baldosas y ladrillos: la rápida transmisión del calor.
La primera referencia de una estufa de Inercia, que conserva el calor,v iene del año 1557, tan solo 7 años después del comienza de la Pequeña Edad de Hielo. En esa época pequeños propietarios ya empezaban a investigar diferentes maneras de almacenar el calor y de gastar menos leña en invierno.
En 1763 Federico El Grande de Rusia fomento una competición para encontrar “una estufa que gastara menos leña”. Los gobiernos de Suecia, Dinamarca y Noruega le siguieron pocos años después. En este siglo se consiguió ralentizar el humo a través de pequeños circuitos para que dejara parte de su calor antes de llegar a la chimenea. Esto fue un gran aumento de la técnica en cuestión de eficiencia. El principio de las estufas de inercia o de mampostería hoy en día es el mismo que hace trescientos años pero mucho mas refinado.
Durante los siguientes siglos el humo viajo por largos circuitos a través de todo tipo de estufas,dando lugar a todo tipo de sistemas en cuestión de tamaños,modelos y formas enormemente creativas.
Curiosamente,después de todos estos esfuerzos para superar esta primera crisis de la energía la solución vino de la mano del carbón, posteriormente del petróleo,el gas y la electricidad. Es ahora, a las puertas de una nueva y mas profunda crisis energética que volvemos a mirar a algunos de los antiguos modos de calefacción con otros ojos, más respetuosos hacia una antigua forma de calentarse y que vuelve a florecer ahora.
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